Trastornos de ansiedad
Cuando hablamos de trastornos de ansiedad, nos referimos a una serie de síntomas físicos y emocionales que pueden incluir sudoración, opresión en el pecho, vómitos, temblores y un miedo intenso, a menudo sin una causa aparente. Estas sensaciones pueden manifestarse de diversas formas, como ataques de pánico, agorafobia (miedo a estar en espacios cerrados), fobia social, fobias específicas, trastorno de estrés postraumático, o trastorno de ansiedad generalizada.
Para abordar estos problemas, empleamos la terapia emocional integradora, combinada con el enfoque psicoterapéutico conocido como EMDR (Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares). El objetivo es reducir la sintomatología asociada a experiencias adversas y estresantes que generan niveles elevados de ansiedad. Mediante esta combinación de enfoques terapéuticos, se ayuda al paciente a abordar y superar las causas subyacentes de su ansiedad.
La terapia emocional integradora proporciona un espacio seguro y de apoyo para explorar las emociones y pensamientos relacionados con la ansiedad. En el caso de utilizar la terapia EMDR, el enfoque está basado en la estimulación bilateral, que puede incluir movimientos oculares, sonidos o toques táctiles. Esta técnica ayuda a procesar de manera adecuada las experiencias traumáticas o estresantes, reduciendo así la respuesta ansiosa asociada a ellas.
